Puede que no te hayas parado a razonar la presencia del agua en las rutinas de belleza, pero es un elemento básico e indispensable. Para la ducha, para limpiarnos la cara, para el afeitado, para lavarnos las manos… Para todo ello, utilizamos el agua. Ahora, lo que quizás no sabías es que la temperatura del agua sí que importa.
Desde nuestro Centro de Estética en Sabadell queremos informarte de cuál es la idónea para cada actividad; por esta razón, a continuación, te damos unas directrices muy útiles. Porque no hay nada como un Centro de Estética en Sabadell de confianza para que te los mejores trucos de belleza.
Para la ducha
A todos nos gusta que en una ducha el agua esté tan calentita hasta que se crea ese vaho tan acogedor; sobre todo, en invierno. Pero lo cierto es que el agua caliente a la piel no le beneficia tanto: puede hacer que nos despojemos de los “aceites” que crea nuestro organismo para proteger la piel, dejándola seca y vulnerable al agrietamiento.
Desde Cuida’t, como Centro de Estética en Sabadell, te advertimos que lo mejor es utilizar agua tibia, que no llegue a estar muy fría, porque el agua caliente abre los poros y eso es bueno. Progresivamente, eso sí, debes procurar que sea más fría que al inicio, así reactivaremos la circulación y evitaremos que repercuta en la sequedad de nuestra piel.
Para el aclarado del champú
Igual que hemos dicho que el agua caliente no es lo mejor para nuestra piel, tampoco lo es para nuestro pelo. Lo ideal es conseguir que no esté demasiado fría, pero sí que un poco más que la temperatura que utilizamos para el cuerpo; tu pelo te lo agradecerá. Ya verás como te dura más tiempo limpio y lo verás más fuerte con el paso del tiempo.
Para lavarnos la cara
Hemos dicho que el agua caliente ayuda a abrir los poros, pero el peligro es que demasiado caliente nos puede secar e irritar la piel. Para darle al rostro la mejor cara, debemos darle una temperatura calentita al inicio y tibia para finalizar ya que, al ser algo más “fría”, hará que se cierren los poros (pero asegúrate de que nunca es fría del todo).
Para el afeitado
Como consejo de Centro de Estética en Sabadell de confianza, aconsejamos a todos los chicos que se afeiten al final de la ducha; de esta manera se le da a la piel el tiempo necesario para que no esté tan rígida, se suavice y permita el corte del pelo con mayor facilidad.
Para cepillarse los dientes
La mayoría de nosotros probablemente nos cepillamos los dientes con agua fría, pero lo cierto es que la limpieza se intensifica si realizamos el enjuague con agua caliente. Cuando se trata de cepillarnos los dientes, la temperatura del agua en realidad no tiene consecuencias graves.
Hasta aquí los consejos, del Centro de Estética en Sabadell Cuida’t, sobre qué temperatura utilizar para cada ritual de belleza en la que el agua es un elemento esencial para la limpieza.
¡Esperamos que os haya sido muy útil!