Durante la juventud principalmente muchos de nosotros hemos sufrido de lo molesto que puede llegar a ser el acné. Sin embargo está comprobado que está condición afecta a todo tipo de personas de todas las edades y géneros. Aunque no es peligroso para la salud, puede ser muy frustrante y afectar la autoestima de quienes lo padecen. Muchos mitos, soluciones milagrosas, tratamientos de todo tipo que van desde lo más natural hasta lo experimental circulan en redes todo el tiempo, pero realmente, ¿qué dice la ciencia de esto?
Según estudios y fuentes de confianza se puede certificar que existen soluciones y formas de prevenir y tratar el acne. Hoy desde aquí para ti que puedes estar padeciendo esta condición te traemos los consejos profesionales que necesitas para lograr una piel clara y saludable incluso aunque esté dañada ya por el tiempo de afección del acné en tu cuerpo, también debemos dejarte claro que cosas no hacer, que muchas veces son recomendadas por alguien que no sabe a ciencia cierta lo que dice y lejos de mejorar puede hacerte empeorar.
Causas más comunes del acné
Primero debemos empezar por identificar correctamente la causa particular de que nuestro cuerpo se vea afectado por el acné en cualquier momento de nuestra vida. De forma general se conoce que este se produce cuando los folículos pilosos de la piel se obstruyen con grasa corporal y células muertas de la piel. Esta causa general está dada por un gran número de factores que podemos identifcar sin problema. Aquí te dejamos los tres más comunes.
- Cambios hormonales: Durante la pubertad, principalmente, los cambios hormonales pueden estimular la producción de sebo, lo que aumenta las posibilidades de desarrollar acné dependiendo de la naturaleza de la piel de cada persona, mientras más contenido en grasas tenga la piel por naturaleza,al aumentar la producción de esta mayor será la posibilidad de desarrollar acné.
- Estrés: El estrés puede desencadenar la producción de hormonas que estimulan las glándulas sebáceas, de igual forma esto desencadena que la producción de grasas crezca y se de como resultado el acné.
- Productos para el cuidado de la piel inadecuados: El uso de productos que no son adecuados para tu tipo de piel puede obstruir los poros y desencadenar brotes.
Cosas que las personas hacen y empeoran el acné, no lo hagas
Como dijimos al inicio, a veces, sin saberlo, nuestras acciones diarias pueden empeorar el acné. Por tanto hay ciertas prácticas que debemos detener en caso de que se tengan como usuales:
- Exprimir o tocar los granos: Aunque puede ser tentador, exprimir o tocar los granos puede empeorar la inflamación y dejar cicatrices en la piel.
- Usar productos comedogénicos: Algunos productos para el cuidado de la piel, como ciertos aceites y maquillajes, pueden obstruir los poros y agravar el acné. Opta por productos no comedogénicos.
- Lavar la cara en exceso: Lavar la cara más de dos veces al día puede eliminar los aceites naturales de la piel y provocar sequedad, lo que puede desencadenar una producción excesiva de sebo y empeorar el acné. Esto principalmente es una de esas prácticas que muchas personas recomiendan pero que realmente no te hará bien.
- Exponerse al sol sin protección: Aunque la exposición al sol puede secar temporalmente los granos, también puede dañar la piel y empeorar el acné a largo plazo. Siempre usa protector solar.
Consejos profesionales y tratamientos efectivos contra el acné
Ahora que conoces las causas comunes del acné y las cosas que debes evitar, es hora de explorar los consejos profesionales y tratamientos que son realmente efectivos de cara a tratar esta condición.
- Mantén una buena higiene de la piel: Lávate la cara dos veces al día con un limpiador suave y sin fragancia. Evita frotar o raspar la piel con una toalla, ya que esto puede irritarla.
- Utiliza productos adecuados para tu tipo de piel: Elige productos para el cuidado de la piel que sean adecuados para tu tipo de piel. Busca aquellos que contengan ingredientes como ácido salicílico o peróxido de benzoilo, que pueden ayudar a reducir la inflamación y el enrojecimiento asociados con el acné.
- Considera tratamientos más intensivos: Si el acné persiste o es más grave, es posible que necesites tratamientos más intensivos. Los retinoides tópicos, como el ácido retinoico, pueden ayudar a desobstruir los poros y prevenir la formación de nuevos granos. Además, los antibióticos orales pueden ser recetados por un dermatólogo para tratar el acné inflamatorio.
- Consulta a un dermatólogo: Si estás luchando contra el acné y no encuentras alivio con los consejos y tratamientos mencionados, es recomendable que consultes a un dermatólogo. Un dermatólogo podrá evaluar tu situación específica y recomendarte el tratamiento más adecuado para tu tipo de piel y gravedad del acné.