¡STOP A LOS MALOS HÁBITOS EN TU RUTINA FACIAL!
Aunque gracias a Internet tenemos la suerte de poder acceder, cada vez más, a mucha información; la verdad es que, aún y así, seguimos padeciendo el síndrome de la desinformación. O quizás, mejor, llamémoslo, sobreinformación. Nos saturamos con tantos contenidos que, al final, tampoco sabemos diferenciar entre los que nos dan consejos certeros y los…